Morena hegemonía es un término que ha cobrado cada vez más importancia en el análisis político de México. El partido, fundado por Andrés Manuel López Obrador (AMLO), ha logrado un dominio significativo a nivel político desde su llegada al poder en 2018. Actualmente, Morena controla la presidencia, el Congreso y 24 de las 32 gobernaciones del país. Además, ha extendido su influencia en la Justicia tras unas elecciones donde apenas se alcanzó un 13% de participación. Este fenómeno político trae a la memoria el predominio histórico del PRI, un partido que gobernó México sin interrupciones entre 1917 y 2000. Aunque hay diferencias clave, las similitudes invitan a un análisis profundo de la situación actual.
Morena hegemonía: Control político y legislativo
Morena se ha consolidado como un partido hegemónico, gracias a su control político que incluye tanto la presidencia como el Congreso. Claudia Sheinbaum, su líder más destacada, ha sido contundente en reafirmar el compromiso del partido con los ideales de austeridad y el acercamiento a las necesidades del pueblo. A pesar de que algunas leyes recientes otorgan al Estado amplios poderes para acceder a sistemas de comunicación y financieros, Sheinbaum insiste en que Morena se distancia del PRI en aspectos fundamentales de afiliación y enfoque. Este control legislativo y ejecutivo despierta inquietudes entre los críticos, que temen un posible paralelismo con la estructura autoritaria del antiguo PRI.
Comparaciones entre Morena y el PRI
El PRI representó un sistema político complejo que gobernó durante 70 años en un contexto global marcado por eventos como la Segunda Guerra Mundial y la Guerra Fría. En contraste, Morena opera en un entorno de integración económica con Norteamérica y en un México que ha cambiado tanto demográficamente como en términos de pobreza. Uno de los aspectos más notables es la diferencia en su enfoque humanista. Mientras que el PRI era conocido por su poder autoritario y clientelismo, Morena enfatiza políticas que, al menos en teoría, buscan beneficiar a los sectores más vulnerables de la población.
Apoyo ciudadano y diferencias estructurales
Claudia Sheinbaum logró ganar las elecciones de 2024 por un amplio margen de 30 puntos y cuenta con un impresionante 80% de apoyo popular en las encuestas. No obstante, analistas apuntan que el PRI también gozaba de un respaldo similar en sus primeras décadas de gobierno. Ambos partidos han priorizado históricamente a los más vulnerables. El PRI logró reducciones significativas de pobreza en los años 60 y 70, mientras que Morena ha presentado avances en este mismo frente durante sus primeros siete años de gobierno. Aun así, los críticos destacan que, pese a las políticas sociales, la pobreza persiste.
Aspectos críticos y militarización
Morena enfrenta críticas actuales que apuntan a la posibilidad de convertirse en un grupo que privilegie a unos pocos, tal como sucedió con el PRI en su momento. Las preocupaciones aumentan con el uso extendido de los militares en México, quienes ahora gestionan infraestructuras clave y temas de migración. Históricamente, el PRI también recurrió al uso del ejército para mantenerse en control, lo cual despierta temores sobre una posible repetición de eventos pasados.
Un futuro incierto: Análisis y perspectivas
Morena, al igual que el PRI en su tiempo, utiliza las elecciones como herramienta de legitimación. La figura de un líder carismático y el uso estratégico de los militares en roles administrativos y de seguridad son puntos de convergencia y divergencia en esta comparación histórica. Ante este panorama, queda por ver cómo evolucionará la estructura política de México bajo la hegemonía de Morena y si, finalmente, se cumplirán las promesas de un gobierno más justo y equitativo para todos los ciudadanos.